Trump confirma que Europa ya no puede depender militar y estratégicamente de EEUU.
La nueva Estrategia de Seguridad Nacional consolida el giro geopolítico de la Casa Blanca y termina la relación bajo términos definidos después de la Segunda Guerra Mundial.
EEUU apoyará a los partidos patrióticos europeos para ayudar a Europa a 'corregir' su trayectoria; avisando la UE debe garantizar su propia seguridad y autonomía estratégica.
Advierte a Europa que podría estar ante la 'desaparición' de su civilización y prevee que sus países podrían carecer de ejércitos y economías fuertes en 20 años.
Acepta que la OTAN no se expandirá 'perpetuamente'.
Conclusión: Europa se enfrenta a un desafío histórico en el cámbio del orden internacional y necesita líderes para tomar decisiones audaces para asegurar su futuro.