El anteproyecto de ley de consumo sostenible aprobado por el Consejo de Ministros favorece la reparabilidad de los electrodomésticos y combate el ecopostureo.
La regulación propone un modelo que cuida el medio ambiente, promueve la responsabilidad empresarial y protege a los ciudadanos, con impacto en publicidad, reparación de bienes, reventa de entradas, y etiquetado de productos.
El texto prohíbe etiquetas ambientales no verificables, publicidad de combustibles fósiles y vuelos cortos si hay alternativas más limpias, y defiende contra la obsolescencia programada.
También proporciona protección de consumidores contra la reventa de entradas a alto precio, la reduflación no identificada en productos y publicidad opaca, incluyendo publicidad del miedo.
La propuesta de ley, al empoderar al consumidor, intenta cambiar la actual percepción del consumidor como menor actor en la relación medio ambiente-consumidor-empresas.
Sin embargo, la ubicación política actual del Congreso, que es fragmentada y volátil, presenta obstáculos a que este anteproyecto de ley llegue a ser legislación.
Conclusión: El anteproyecto de ley representa un avance significativo en favor de la sostenibilidad y la protección del consumidor, aunque aún enfrenta retos antes de su aprobación final.