Los problemas de salud mental han aumentado en España, con un crecimiento del 72% desde 2020, llegando a 643.681 en 2024.
Las mujeres representan la mayoría (58%) de estas bajas laborales.
Estas bajas poseen una duración media de 108 días, siendo las terceras más prolongadas después de los tumores y los procesos cardiovasculares.
Las malas condiciones laborales, bajos salarios y el constante monitoreo de los empleados contribuyen a estos cuadros de ansiedad y depresión.
Los sectores con mayor número de bajas son la sanidad y la educación.
Se demanda una mayor precisión en la legislación para prevenir estos problemas.
Es necesario invertir en la salud mental a nivel sanitario y laboral, incluyendo una noción de seguridad que abarque los riesgos psicológicos.
Conclusión: La creciente incidencia de problemas de salud mental en España demanda cambios estructurales, legislativos y de cultura laboral. Se hace evidente la necesidad de intervenciones más profundas que solo el tratamiento farmacológico.