Emmanuel Macron destacó la necesidad de un nuevo orden internacional durante su visita a China.
La intención de Macron es reactivar las relaciones con China y distinguir los intereses de Francia y Europa de los de los Estados Unidos.
China aún no responde a los intentos de Macron de obtener su ayuda para influir en Rusia.
La guerra comercial con los Estados Unidos ha fortalecido el sentimiento de poder de China.
Hay creciente resistencia a China en cuestiones comerciales, evidencia de productos chinos de bajo costo.
Macron intenta expresar a China que la situación actual no es sostenible.
Conclusión: La débil presencia de Europa contrasta con el creciente poderío de China, presentando una relación que parece dirigirse hacia más proteccionismo y desconfianza.